El ataque contra el buque de
carga “Maersk Alabama” por piratas somalíes el 8 de abril de 2009 mientras
navegaba a lo largo de la costa de Somalia en dirección a Mombasa fue el primer
acto de piratería contra un barco estadounidense que se registraba en los
últimos doscientos años. Después del abordaje, los marineros lograron que los
piratas abandonasen el buque en un bote salvavidas, pero éstos tomaron al
capitán Richard Phillips como rehén, que terminó siendo rescatado por soldados
norteamericanos tres días después.
El teniente Colombo quiso comprobar cómo había
reconstruido el director británico Paul Greengrass aquél caso real, y decidió
acercarse al cine de su barrio para vivir durante dos horas esa aventura en la
pantalla grande. El precio de la entrada (9,40€) era una cantidad asumible por
sus finanzas.
“La película es un thriller absorbente y angustioso, realmente
adrenalínico, que no da un minuto de respiro al espectador”, opina el teniente
Colombo, todavía sobrecogido por la tensión sufrida en el patio de butacas.
“Mención
aparte merece la interpretación de Tom Hanks: sencillamente magistral, sublime
y perfectamente creíble. Viéndole moverse por el barco transmite la sensación
de haberse dedicado a ser marino mercante durante los últimos treinta años de
su vida. Su interpretación es, de principio a fin, grandiosa”, opina el
teniente Colombo, mientras recomienda la película a todo aquél que diera
disfrutar de dos horas de buen cine y de una historia contada con gran
habilidad.
Capitán Phillips (Paul Greengrass, 2013, Columbia
Pictures)